1. Las mazorcas y las habas
El fruto del árbol del cacao es la mazorca. De forma ovoide, la mazorca mide unos 10-25 cm de largo y 15 cm de ancho y puede pesar hasta 750 gramos.
En su interior se encuentran las habas de cacao, recubiertas de pulpa. Cada fruto contiene unas cuarenta habas.
Mazorca
Habas
2. La fermentación
Las habas se amontonan en el suelo o se ponen en cajas, y se cubren con hojas de plátano. La fermentación dura entre dos y seis días. Durante este tiempo, se da la vuelta a las habas con regularidad para igualar su fermentación. De este modo, las habas, desprendiéndose de la pulpa, adquieren su color y sabor específicos.
3. El secado
Los granos deben secarse antes de poder ser expedidos. Se extienden y se exponen al sol durante dos semanas. En esta etapa, también se les da la vuelta con regularidad.
4. Selección y limpieza
Esta etapa consiste en comprobar la buena calidad de las habas de cacao. Tras seleccionar rigurosamente las habas de buena calidad, se someten a una última comprobación.
5. La torrefacción
Las habas se calientan a una temperatura de entre 120º y 130ºC durante 15-35 minutos. Durante la torrefacción, las habas pierden entre un 5 y un 15% de su peso inicial. La torrefacción potencia su sabor.
6. De la semilla a la pasta de cacao
Una vez terminada la torrefacción, las habas de cacao se colocan en una trituradora. Esta operación permite separar los granos de su cascara.
A continuación, las habas procedentes de diferentes zonas de plantación, se mezclan para obtener el sabor deseado. Tras efectuar todas estas transformaciones, las habas se someten a un nuevo control y se muelen hasta obtener una pasta compacta.
7. De la pasta de cacao al consumo
Para obtener chocolate, a la pasta de cacao se le añade manteca de cacao, además de la que contienen las habas de forma natural. Eso es lo que hace que el chocolate se pueda romper y fundir, características del buen chocolate.
La técnica del conchado consiste en amasar la pasta durante varias horas. Cuanto más tiempo se amase, mayor será su finura y untuosidad y menor el amargor presente en la pasta de cacao.
8. Los diferentes tipos de chocolate
- El chocolate negro: Se compone de un mínimo de 45% de pasta de cacao, manteca de cacao, azúcar, lecitina de soja y aroma (generalmente vainilla).
- El chocolate con leche: Se compone de un mínimo de 35% de pasta de cacao, manteca de cacao, leche, azúcar, lecitina de soja y aroma (generalmente vainilla).
- El chocolate blanco: El chocolate blanco se compone de manteca de cacao, leche, azúcar, lecitina de soja y aromas (generalmente vainilla).
9. LA FABRICACIÓN DE PRALINES
El moldeado: Consiste en verter chocolate fundido en un molde, después vaciarlo. A continuación, hay que dejarlo enfriar y endurecer para poder rellenarlo con la ganache y añadir una nueva capa de chocolate líquido, para cerrar el praline. Una vez endurecido de nuevo, los pralines se desmoldan y se les da la vuelta.
La cobertura: El ganache solido y cortado a medida se sumergen en un baño de chocolate líquido donde pasan bajo una “cortina” de chocolate.
10. La Temperatura
La temperatura juega un papel muy importante en la elaboración de los pralines.
Para trabajar el chocolate negro, se precisa una temperatura de 31-32 ºC.
Para trabajar el chocolate con leche, se precisa una temperatura de 30ºC.
Para trabajar el chocolate blanco, se precisa una temperatura de 28ºC.
La Conservación: Como cualquier otro producto alimenticio, el chocolate tiene una vida limitada. El chocolate negro puede conservarse hasta 1 año, mientras que el chocolate blanco puede conservarse durante 6 meses.
El chocolate debe conservarse a una temperatura de entre 15º y 18ºC, en un lugar seco.